Thursday, July 05, 2007

so faR


Pedí estuvieras conmigo en este pequeño incendio. El frío de la noche estaba helando las fuentes. Me encontré agresiva. Arriba tuyo. Acariciando tu cuello con mis labios y lengua. Bajé mi mano para condenarte y allí quedamos. Jugando. En batalla. El cambio de ambiente determinó el cambio de acción. Y te quise desnudo delante mio. Esta noche. Los tragos y tu cuerpo. Ya no jugaban ni el frío ni el fuego. Y mis manos ardían como mi boca. Eras mio. Fui tuya. Y ambos nos transportamos. La risa nos devolvió la vida. Las palabras llenaron una nueva espera. Y la despedida un nuevo viaje. Humo que mata pulmones despidieron nuestras bocas
y la cama nos apogeo de la nueva rutina que nos esperaba.-